Hombres de radio (III): William


ENRIQUE DE CIA AMESTOY 

 (SIR WILLIAM)

Nos causaba enorme alegría haber quedado con él, amén de que a lo largo de nuestra existencia, habían sido incontables las veces de encuentro y tanta la intimidad como las conversaciones, así como las horas de radio compartidas. En esta ocasión, había un matiz a añadir, la cita era para entrevistarle a fin de que nos contara para este libro, cosas que... ¡Tú solo sabes!

 - Os voy a decepcionar.

 - No temas -le dijimos- con nosotros tienes bula, eres inmune a las críticas y a los análisis. Acto seguido se justificó. - Es porque no me lo apunto...

 Conocemos de sobra al amigo William y confiábamos en que sus palabras no tardarían en salir raudas desde el recóndito escondite de su caja de Pandora. Por eso, a pesar de su  aparente reticencia inicial a soltarse, por esa tímida tendencia suya a no considerar su gran profesionalidad y más que sobrados conocimientos, decidimos contagiarle nuestro entusiasmo tratando de “empujarlo” a largar, de entrada con una cita de cosecha propia.

 - Si no buceas a fondo en la memoria, nunca alcanzarás el final de la tubería. Mira, tú si vas a una ciudad, en la que no has estado hace mucho tiempo, no necesitas recordarla, ella en cambio, en cada esquina, te devuelve ecos de tu estancia anterior, tus pasos pretéritos y sus eternos encantos.

 - ¿Dónde he dejado el cenicero? Se lo habrá llevado ésta…

 Volvió la cabeza William, intentando localizar a la joven inmigrante, que nos acababa de atender. No quisiéramos que esto se alargara, como una charla habitual entre amigos del alma, que hace tiempo que no se ven. Esta cita iba a ser extraordinaria y, debiera resultar productiva. Nos tocaba obviar que éramos compinches de juegos, y disponer ya los trastos para tratarle como a un entrevistado más, en nuestro papel de escritores navegantes que pretenden orientar bien el balandro. (William seguía a lo suyo, buscando el cenicero) (Seguir leyendo...)

Comentarios